Mamá Nydia: La mujer que convirtió la Solidaridad en camino, causa y destino

Con profundo dolor, pero con infinita gratitud, la Fundación Solidaridad por Colombia lamenta el fallecimiento de su fundadora, Nydia Quintero Turbay de Balcázar.

Hoy despedimos a una mujer excepcional, que dedicó su vida a servir a los demás, a tender la mano a quienes más lo necesitaban, a transformar la ayuda en amor colectivo y a convertir la solidaridad en una forma de vivir.

Fue, sin duda, una de las mujeres más importantes y admiradas de Colombia en el siglo XX. Hace cinco décadas, doña Nydia, como cariñosamente la llamábamos, soñó con un país donde la solidaridad no fuera un gesto aislado, sino un movimiento capaz de unir a millones de personas. Y lo logró.

De ese sueño nació la Fundación Solidaridad por Colombia, con el propósito de acompañar, inspirar y servir, movilizando a personas, empresas y entidades públicas y privadas en torno a un mismo sentir: fomentar la solidaridad y, a través de ella, cambiar la forma en que los colombianos entendíamos la ayuda. La convirtió en un acto cotidiano, humano y transformador.

Durante años, y sin descanso, lideró una causa que llegó a los rincones más olvidados del país. Su voz fue inspiración, su mirada fue guía, su ternura fue abrigo. A ella no la llamaban presidenta, ni directora, ni líder. Sus beneficiarios la llamaban con un nombre que lo decía todo: Mamá Nydia.

Gracias a su legado, millones de colombianos han tenido una segunda oportunidad: niños, jóvenes, madres, adultos mayores, comunidades enteras. Su impacto se multiplica aún hoy en cada sonrisa que nace de una beca entregada, de una mano tendida, de un plato servido o de una esperanza sembrada.

Doña Nydia ya no está físicamente con nosotros, pero su espíritu sigue vivo en cada acto de generosidad, en cada vida transformada, en cada colombiano que entiende que ayudar no es dar lo que sobra, sino compartir lo que somos.

No dejemos morir su legado. Hoy más que nunca, Colombia necesita seguir creyendo en la solidaridad. Porque, como ella misma decía:

“Pequeños actos de solidaridad en millones de personas pueden transformar el mundo.”

A todas las personas que fueron impactadas por su luz, a quienes la vieron luchar y amar sin medida, les pedimos que no dejen de multiplicar el mayor regalo que nos dejó: el amor por el prójimo y la solidaridad como motor de transformación.

Hoy, más que nunca, tenemos el deber de continuar lo que ella, hace 50 años, comenzó.

Gracias, Mamá Nydia.
Tu vida fue un acto de amor. Tu legado, una promesa que seguiremos cumpliendo.

Contacto de prensa:
Stiven Escudero Samacá
Coordinador de Marca y Prensa
Fundación Solidaridad por Colombia
313 814 1579
digital@solidaridadporcolombia.org

Translate »